Después de cuatro años sin lanzar un nuevo álbum de estudio, la banda islandesa está de regreso con un nuevo álbum que destaca las estructuras musicales que los popularizaron. Además el álbum llega con una propuesta visual concretada en el único video oficial que han compartido del mismo que han compartido hasta el momento: Alligator.
Además de ese primer sencillo ya habíamos escuchado también Wild Roses tema que contrasta un poco la estructura pop del primer sencillo y aporta una vibra más experimental. El disco en general transita entre distintos humores, por momentos animado y rockero, por momentos francamente popero y por momentos profundamente melancólico y sentido.
Sin duda una interesante nueva expresión de la banda que es consecuente con el sonido que los hizo conocidos, misma que, con su correlato visual, expande las herramientas de la banda a un dominio más amplio y que ofrece más que la mera música.