Como una solemne expresión de la alegría que la música le causaba en vida a Malcolm James McCormick, este fin de semana se publicó el primer álbum póstumo del músico y rapero que falleciera tras una sobredosis de drogas el pasado septiembre de 2018.
Su caso ha llamado la atención sobre la salud mental y el consumo de drogas, sumándose a casos como el del DJ Avicii, pues se sabe bien de las dificultades con la depresión que el músico experimentó en vida. Un lado melancólico que muchas veces pasaba desapercibido en su música pero que en esta nueva producción se sublima como un solemne reconocimiento de su vida, su dolor y su pasión musical.
Con un inevitable aura melancólica, Circles transcurre con mucha paz pero también con un hondo llamado a la introspección, como un certero testimonio de una vida interna rica, divertida, oscura y, sobre todo, llena de juventud y vida. Una vida que hoy no puede seguir adelante pero que se reanima con las notas, las líneas y el rapeo del nacido en Pensilvania.
