Tras un par de años de su última producción, uno de los talentos punta de lanza de la reciente ola musical chilena que se ha expandido por Latinoamérica, el inigualable Gepe, está de regreso con un tema que aporta las mejores cualidades del sonido del compositor y cantante: el carismático y colorido folklor andino y una lírica sencilla pero profundamente romántica con la que resulta fácil identificarse.
Como preparando el camino de lo que esperemos sea un nuevo álbum de estudio, Prisionero habla de esas historias de solidaridad y amor que construye la soledad. En este caso la soledad acompañada y la soledad que añora a esa soledad [«mal»] acompañada. El juego metafórico de la letra de este track juega justo con la figura de un amor que aprisiona y la situación real de quien se encuentra prisionero.
Por su parte, el video, harto pertinente y significativo, nos muestra un grupo de trabajadores en condiciones forzadas, con símbolos para la muerte y la esperanza y, allí mismo, nos muestra su particular unidad construida en el dolor y en la soledad compartida. Sin duda el excelente complemento para un tema folcklórico y rico que, además, captura bien, en lo visual y lo sonoro, el espíritu de la historia andina.